El instinto no engañará a Penny Barber, no se equivocó en buscar seducir al empleado dotado. La experiencia de 37 años le juega a favor de la milf, la forma de desnudarlo es tirarle una toalla para que se bañe luego de trabajar. Luego de comprobar que estaba en lo cierto fue directo al beso para que le arrebate la falda. Directo a la cama lo llevó, sin soltar esa cosa dura y caliente que está tan al dente que solo quiere chupar.