Cada día los pensamientos de Robby son mas fuertes, encima Becky (34) no ayuda para que se terminen. Usa camisetas blancas sin sujetador donde las terribles tetas se dibujan y marcan pezones. No sabe si lo hace queriendo o simplemente por que le gusta estar siempre sin sujetador. Pero hoy, con la escusa de bailar, logrará acercarse un poco mas y se anima a lanzar un beso. Pero ni siquiera lo deja llegar, un paso hacia atrás y el mundo se vino abajo. Ha sido rechazado, pero no, solo quiere dejarle los puntos en claro, esto debe ser un secreto. Sin que se lo pida ella misma despejó la vista a los pechos para llevarlo hasta el sillón. Allí le hizo un oral antes de quitarse toda la ropa consiguiendo por fin ver desnuda a esta preciosa madura. Una pierna sobre el hombro, frota el pene contra papos para incrustarse firme y profundo. Luego lo monta, las terribles tetas en su cara se tambalean mientras bombea con todo lo que tiene. Seguirán este encuentro que revela que era un sentimiento mutuo.