Nikki cae en la trampa de la vecina quien le dice que puede ayudarlo a estudiar pues antes fue maestra. Aunque poco sabe el jovencito que lo que aprenderá es el placer de meterse detrás en una mujer. Resulta que la respetable vecina está mas cachonda que nunca y a poco de empezar se pone mimosa. No habla, pero él comprende, invitado a tocarle las tetas lo hace aun temeroso. Cuestión que la mujer está bien firme y sabe como endurecer a cualquier hombre. Ella es la primera en desnudarse pues quiere que la babosee por detrás. El sabor le resultó tan delicioso que se quedó allí lamiendo por un rato. Ya sacarla es mas fácil para que la vecina le haga un buen oral. De reversa ella maneja la situación, primero en vagina para lubricar. Luego una pausa, sube el cuerpo, sujeta el pene y lo cambia de lugar. Así comienza este anal cuarentona que muchos quisieran vivir en carne propia.