La señora requiere sus servicios, aunque esta vez ella llevará al chófer del marido a estacionarse en su culito. Lisa Ann se prepara para irse de vacaciones cuando el aroma del bronceador la pone cachonda. Frotarse en aceite todo su cuerpo incluidas esas tetas soñadas hace que mas caliente se ponga.
El chófer del marido ha llegado, quien queda asombrado por el sexy y escotado vestido. Es cuando le pide que pase para preguntarle que bikini debe llevar donde le mostrará lo bien que le queda el celeste. Asombrado por la figura de la esposa del jefe no sabe como halagar semejante escultura.
Pero su expresión fue suficiente para que Lisa lo sorprenda de rodillas pidiendo que la saque para chuparla. Claro que se la dejó servida junto a los labios y que ella hizo largo oral para enfurecer la erección. En poco ha estacionado la chota en el culito de esta preciosa madura que te dará ganas de ir al baño.