Su hija tiene amigas atrevidas, como Anya Olsen, quien no tiene vergüenza en mostrarse desnuda y menos en comerle la pinchila. Sucede que Stirling Cooper atiende la puerta, es la joven rubia que viene a pedir un vestido prestado, pero su hija no está, pero le dijo que vendría por lo que la deja pasar. Mientras se va desnudando puede ver que el padre de su amiga está mirando tras la puerta, sin embargo nada le dice, le encanta el juego. De repente le pregunta si le gusta como le queda, asustado no sabe que hacer, pero se anima a entrar. Creo que me quería mejor sin ropa interior le dice y comienza a desnudarse. Poco pasará para que ambos terminen desnudos arrugando las sábanas.