No está conforme con el tamaño de su culo, Romeo Price dice que en anal es bueno para eso y la pelirroja confiada acepta. Hazel Moore está mal, siempre quiso tener un trasero gordo, pero ni siquiera puede hacer twerking. Se ha propuesto hacer ejercicios pero al no ver resultados inmediatos se bajonea. Allí aparece este muchacho a quien le cuenta lo que le pasa, al verla tan triste le dice, que por algún lado ha escuchado, que coger por ese lugar agranda las nalgas. Nada tarda en pensarlo, su sueño está mas cerca que nunca y le pide si puede ayudarla. ¿Quien se negaría al pedido?, pues él tampoco. Claro que probará esa calva raja antes de entrarle al trasero, el mismo que con forma de cono se quedará con el semen acumulado.