De alguna manera confiesa ser virgen, esa señora gentil se puso a su disposición ofreciéndose a desvirgarlo. Si bien algunas agentes de bienes raíces tienen sus tácticas para vender casas y pueden terminar en la cama, no es el caso de Anissa Kate. Pues en este caso la intención no es económica, mas bien empatía, pues cuando este muchacho, un joven nerd que se la pasa encerrado programando, afirma en su nerviosismo, nunca haber tocado una mujer. Guau, la candente pechugona se siente prácticamente obligada a ayudarlo ofreciendo su cuerpo para que por fin pueda tener relaciones con un chica. Sin poder creer lo que pasa tiene a esa belleza francesa reposando labios en el único músculo que no le tiembla. Luego se quitó la ropa invitándolo a correr la tanga para que vea y toque una vagina real. Oh, guau, nunca había visto una que no sea por películas afirma y poco después el emocionado desvirgado llega a animarse a dar unas tímidas nalgadas a esta señora gentil que lo llevará directo al cielo.