Salir con una mamá guarra trae malos momentos como este, follando en el bar al camarero con su hija a tan solo unos metros. Las chicas salieron a festejar y las dos se han puestos vestidos tan ceñidos que se adhieren a las curvas realzando sus hermosos traseros. La nena de rosa, mamu de amarillo, sentadas doblando espaldas mas espectaculares parecen. El beneficiado de todo esto serán Van Wylde, el apuesto camarero que empieza a denotar interés en desnudarlo por parte de las dos. La competencia ha empezado, quien ganará es la pregunta del millón, la juventud y simpatía de la nena, o la experiencia de una madura que no ha dejado títere con cabeza.