Decidida al Anal Se Entrega al Sugar Daddy

Para recibir hay que entregar, no quiere perder los lujos que él provee, está decidida a dejar que disfrute de su trasero. Kenzie es una chica joven que vive como una reina, pero no es por ser una gran trabajadora, tiene un hombre mayor que la mantiene sin dejarle faltar nada.

Una casa a todo trapo, ropa de la mejor, por sobre todo lencería y cuanto quieras imaginarte, es entendible que no quiera perderlo. Sabe que necesita entregar eso que hasta hoy ha reprimido y puede jugarle en contra.

Feliz va a recibirlo a la puerta donde él aparece con elegante traje y una rosa que entregará en mano a la hermosa rubia que en segundos se cuelga de su cuello para besarlo mas apasionada que nunca. Si bien lo encuentros siempre son fogosos, este será el mejor.

Sujetada por detrás se retuerce de placer al sentir como jala firme entre sus piernas, no usar ropa interior le sirve para que ese fácil vestido pueda subir y despejar el camino para que se arroje de cara entre las nalgas a dar oral en coño y no coño.

Quiere arrodillarse para que pueda empujar hasta lo mas profundo de su garganta, aguantará lo mas que pueda salivando cada rincón, Afirmada contra el vidrio vuelve a sentirlo atrás con el rostro afirmado, es tan bueno que está lista. Se acomodó por detrás, ella se pone en punta de pie para igualar altura, la penetración es perfecta pues está muy dilatada.

Fue tanto el tiempo esperando este momento que el caballero se muestra enérgico y no la quiere sacar, la levantará para continuar follando ese negado trasero manipulando el cuerpo de la joven como si fuera de juguete.

La flexibilidad comienza a aparecer, levanta pierna para que juegue a meter y sacar, pezones erectos parecen que van a explotar, seguirán por varios minutos recorriendo cada rincón de la casa hasta que en la cama deja todo en su interior.