Es ofuscante Cali Carter, hostigando a cada empleado, pero uno en especial entenderá que esa culona necesitaba hombres. Está cansado de tantos reproches por parte de la jefa que parece perseguirlo a cuanto lugar va a hacer sus tareas, hasta que por fin revela su verdadera intensión.
Es cuando le pide que se quite la parte de arriba del uniforme mostrando interés en sus músculos, tan solo tocarlo y luego mirar que tiene bajo el pantalón hizo que la historia de un giro. La llevó a la camilla despojándola del guardapolvo, enterrando hasta garganta profunda y preparando todo para romperle el culo sin compasión, pero saben que, esta señora lo tiene resistente y aguantará los empujones hasta el último segundo.