No tengo ningún problema en reconocer mi predilección por lo que mas me gusta, ya casi tengo casi cuarenta con el derecho a elegir quien y por donde. Para llevarlo a donde quiero me pongo corto vestido azul permitiendo que se vea la hermosa lencería blanca, y no me olvidé de nada, portaligas, bombachita pequeña, todo transparente, pero lo mas importante, un consolador para dilatarme.
Ni lo dejo hablar que estamos en el sillón, allí le hago un show previo para que vea todo, es que la quiero pasar lo mejor posible, y cuanto mas levantas ratones mejor se pone. Me saco la parte de abajo levantando piernas mientras salivo el plug para entregárselo y que juegue sin temor. Luego en cuatro el consolador de bolas que ya ne hace temblar, escuchen mis suspiros, son reales.
¿Nunca tu novia te dejó?, pedile tonto o mostrale este video. Luego que lo tengo como una flor se acurruco entre sus bolas para babosearlo bien, hum, dura como me gusta, y se va poniendo gruesa. No resití la espera y subí dándole la espalda, la tengo toda dentro, es precioso y sabés como te das cuenta que me está enloqueciendo, solo debes observar mi vagina, no la puedo cerrar. Y antes de despedirme quisiera que miren como se hunde la piel en cada empujón, señal que todavía está estrecho y no hay que tener miedo a nuevas sensaciones.