La camisa blanca trasluce culpa del paraguas roto, pero rápido encuentra la forma de calentarse en la oficina. Noelle Easton llega tarde al trabajo, una odisea por comprar en oferta su defensa contra el agua. A pesar de la amargura le sonríe a Jay cuando mira como se transparenta su sujetador. Debe cambiarse de ropa o secarse, el frío la puede enfermar, pero el baño está cerrado y debe hacerlo en una oficina. Es cuando su compañero va a alcanzarle una toalla y se quedas pasmado viendo toda esa belleza. La hermosa joven de falda ajustada se da cuenta que la está mirando y le encanta el juego. Comienza a jugar con los pezones haciendo calentar al muchacho que será su estufa sexual. Besos antes de fregarle los papos para que sus cuerpos estén listo para el intercambio de calor.