La imaginación de Rion lo lleva a las manos de esta Señora de 44 que logrará hacerlo explotar con el polvo de su vida. Esto hace recordar a la época que el porno no existía, un escote era motivo suficiente para jalarse frente a la tv. Algo así le pasa a este soñador que está embobado con las tetas de Dee Williams, una cocinera de televisión a la que dedica pajas constantes. Pero algo distinto pasará hoy, un sueño tan real que lo llevará hasta la cocina de esta rubia de corto pelo lista para desnudarse. Al quedar dormido aparece de la nada junto a la señora de 44 que lo recibe con una gran sonrisa. Sin tiempo que perder afronta el trabajo de endurecer al joven chupando esa salchicha ansiosa de calentarse. Poco después está practicando como rellenar una entrepierna de labios arrugados y resbalosos. Sensacionales pechos a la vista al cabalgarlo sobre la mesada serán el objetivo de la eyaculación que los dejará brillantes.