Luego de acompañarla a su casa me seduce de tal forma que dejamos de ser amigos, creo que será mi novia. Cuando veo que Bailey se va de la fiesta salgo a preguntarle si algo pasó, solo me dice que es de día y que va a su casa, no la puedo dejar sola así que la acompaño. Allí me sorprende cuando me pregunta si la veo de alguna forma diferente que como amiga, pero para su tristeza le digo que no.
Por suerte no se rendirá y será al llegar a la casa que desde el primer piso pone todos sus encantos en juego, ese vestido floreado dibuja su trasero de una forma hermosa, el gesto con el dedo para que la siga y esa mirada que ya no es de mejor amiga.
Entendido, la verdad es que me gusta, en cuanto llego a su lado la beso sintiendo que si quería mas, media vuelta y caigo de rodillas por detrás para quitarle la tanga y recorrer su piel a los besos. Seguido me lleva a la bañera donde oficialmente dejamos nuestra amistad de lado, por lo menos ya somos amantes.